01 abril, 2000

Diane Arbus: El esplendor de lo extraño

Diane Arbus: El esplendor de lo extraño

por Gabriela De Cicco

(Este artículo fue publicado el suplemento cultural del
diario El Litoral de Santa Fe, el 1º de Abril de 2000.)

Diane Nemerox, más conocida como Diane Arbus (New York, 1923-1971), fue y es considerada como una de las más importantes fotógrafas, dentro del género documental. "Soy muy poco proclive a fotografiar gente que es conocida y también hasta temas que sean conocidos. Me fascinan cuando apenas he escuchado hablar de ellos, y cuando se hacen públicos me vuelvo completamente indiferente."

La esencia del trabajo de esta artista se basó, casi exclusivamente, en captar con su lente a aquella gente que vive en el límite de la aceptación social, aquellos/as que han sido considerados "fenómenos", seres que para esta sociedad tan normativa han sido calificados de monstruos, y cuya denominación en inglés, Freaks, nos ha llegado también a través de una vieja y perversa película en blanco y negro del director Todd Browning, que narra las vicisitudes de una pareja de enanos que vive en un circo.

Sin embargo, los personajes de Arbus están en la calle o bien dentro de sus propios hogares. El adentro y el afuera de una existencia llena de marginaciones y discriminaciones terminó por seducir a la fotógrafa, que ha dicho respecto de sus fotos: "Lo que estoy intentando describir es que es imposible salirte de tu piel y meterte en la de algún otro(...) La tragedia de ese algún otro no es la misma que la tuya." Y con esa visión particular Arbus fue armando su mundo de rostros y cuerpos dolientes.

Entre 1955 y 1957 Arbus estudió con Lisette Model, quien la alentó a concentrarse en fotos personales y en desarrollar ese ojo documental incisivo que Model ya había reconocido en su alumna. De allí en más Arbus se dedicó a documentar sus visiones : travestis, gemelas/os, gente de la calle y gente en sus hogares, y también a internos/as de loqueros.

En casi todas sus fotos, los/as personajes aparecen mirando directamente a la cámara y están retratados crudamente, iluminados por el flash de manera directa o con otro tipo de iluminación frontal. Parecen estar dispuestos, si no deseosos, de revelarse a sí mismos ante la cámara de la artista y también revelar sus impedimentos, sus limitaciones, sus malformaciones.

Al ser consultada sobre por qué elegía a esa gente, Arbus ha contestado que "Freaks fue lo que más he fotografiado. Fue una de las primeras cosas que fotografié y ha sido terriblemente motivador para mí. Simplemente, solía adorarlos. Aún adoro a algunos de ellos. Con esto no quiero decir que sean mis mejores amigos, ellos me han hecho sentir una mezcla de vergüenza, temor y asombro. Existe una especie de leyenda acerca de los/as freaks. Como esa persona que en un cuento de hadas te detiene y te exige que resuelvas un acertijo. La mayoría de la gente se pasa su vida temiendo pasar por una experiencia traumática. Los Freaks nacieron con sus traumas. Ellos ya han pasado su prueba. Son aristócratas."

Annie Leibovitz, otra gran fotógrafa, conocida en nuestro medio por las fotos de cantantes, sobre todo aparecidas en la revista Rolling Stone, ha comentado lo siguiente en una entrevista: "Diane Arbus realmente conocía a la gente que fotografiaba y se hacían amigos, se metía en sus cuevas, charlaban un poco... Ella fue una muy, muy importante fotógrafa porque sacaba fotos de gente que, nosotros como sociedad, no queríamos mirar. No que no queríamos mirar, de hecho ni siquiera los veíamos. Fue por éso que cuando me mudé por primera vez a New York en cada esquina podía ver una foto de Diane Arbus. Pero nunca los hubiese visto realmente de no haber visto las fotos de Diane Arbus. No había estado viendo a esta gente mentalmente.

A comienzos de los años sesenta, la fotografías de Arbus atrajeron la atención de la comunidad artística y comenzó a ser reconocida a nivel local. Recibió dos Becas Guggenheim, en 1963 y 1966, que le permitieron continuar con su trabajo.

En 1967 su obra fue expuesta en la muestra "New Documents" en el Museo de Arte Moderno de New York, junto con la de otros dos fotógrafos renovadores: Gary Winogrand and Lee Friedlander. Una exhibición que recibió todo tipo de crítica laudatoria.

En 1970 Arbus editó un portfolio de edición limitada que contenía solamente 10 fotos, pero para entonces ya era reconocida a nivel mundial como una de las/os pioneras/os del "nuevo" estilo documental, llegándose a comparar sus trabajos con los de August Sander, autor del libro Hombres sin máscaras, donde expresaba fotográficamente similares asuntos, pero de una manera, aparentemente, menos dura.

En julio de 1971, Diane Arbus se suicidó en el Greenwich Village de New York. Y como suele suceder en estos casos, su muerte atrajo aún más la atención hacia su nombre y sus fotografías. Al año siguiente de su muerte, Arbus se transformó en la primera fotógrafa americana en estar representada en la Bienal de Venecia.

© 2000 Gabriela De Cicco.
© Fotos/photographs the Estate of Diane Arbus